
“¡Sí pudimos!”, gritaba la gente en las calles. Estados Unidos acabó ayer de un plumazo con la era Bush. El “yes we can” se convirtió en “yes we did it”, y con ello las calles de Chicago y las de todo el país en un auténtico carnaval que celebraba la victoria del primer presidente negro de EEUU.
Barack Obama, un abogado de Harvard de 47 años, hijo de una mujer blanca de Kansas y un hombre negro de Kenia, rompió el legado de la esclavitud y abrió de par en par las puertas de la Casa Blanca para aquellos que hasta hace cincuenta años viajaban en la parte de atrás del autobús y utilizaban baños separados. De ahí las lágrimas que derramaba ayer el reverendo Jesse Jackson, llorando como un niño entre la multitud, pese a que sus diferencias con Obama han sido muy marcadas durante la campaña.
Barack Obama, un abogado de Harvard de 47 años, hijo de una mujer blanca de Kansas y un hombre negro de Kenia, rompió el legado de la esclavitud y abrió de par en par las puertas de la Casa Blanca para aquellos que hasta hace cincuenta años viajaban en la parte de atrás del autobús y utilizaban baños separados. De ahí las lágrimas que derramaba ayer el reverendo Jesse Jackson, llorando como un niño entre la multitud, pese a que sus diferencias con Obama han sido muy marcadas durante la campaña.
3 comentarios:
Yes we can, Yes we can,...
Bienvenidos a la nueva era... hoy es uno de esos días en los que el estómgao tiene una sensación especial...
yes, they did it!
Sera porque has comido alubias!!!!